Corresponsal en roma
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«La ofensiva ya ha golpeado a la población ucraniana de manera trágica. Las imágenes que presenciamos, de ciudadanos indefensos obligados a esconderse en búnkeres y subterráneos, son terribles y nos retrotraen a los días más oscuros de la historia europea». Así ha abierto su discurso el primer ministro italiano, Mario Draghi, para informar con urgencia en la Cámara de Diputados, y luego en el Senado,
sobre la invasión rusa de Ucrania.
El discurso de Draghi fue interrumpido varias veces por aplausos de los parlamentarios en pie: «Italia condena con absoluta firmeza la invasión, que consideramos inaceptable. El ataque es una gravísima violación de la soberanía de un estado libre y democrático, de los tratados internacionales, y de los valores europeos más fundamentales.
No se puede tolerar el regreso de la guerra en Europa», ha afirmado Draghi, revelando que, además de los ataques sobre el terreno, la agresión estuvo precedida por un ataque cibernético, «una invasión a gran escala».
Escondido en algún lugar de Kiev
Con emoción, Mario Draghi ha revelado que esta mañana, alrededor de las 9.30 horas, esperaba hablar con el presidente ucraniano Zelenski, pero «no pude establecer contacto porque no estaba disponible». Estas fueron las palabras de Draghi: «Ayer participé en un Consejo Europeo extraordinario en el que también participó el presidente deUcrania. La conexión con el presidente Zelenski fue un momento verdaderamente dramático. Está escondido en algún lugar de Kiev. Dijo que se le acaba el tiempo, que a Ucrania se le acaba el tiempo, que él y su familia son el objetivo de las fuerzas de invasión rusas.
Fue un momento dramático que conmovió a todos los participantes en el Consejo Europeo. Hoy, antes de venir aquí, me buscó y fijamos una cita telefónica, para las 9.30 horas, pero no fue posible hacer la llamada telefónica porque el presidente ya no estaba disponible».
Sobre la invasión, Draghi ha explicado así la situación: «El Ejército ruso continúa con los lanzamientos de misiles sobre las principales ciudades, incluidas las del centro-oeste de Ucrania. Una lluvia de misiles cayó anoche sobre Kiev, mientras el ejército asediaba varias ciudades. Ucrania hace un balance hasta el momento
de 137 soldados muertos y 316 heridos desde el inicio del ataque y habla de 800 hombres perdidos por las fuerzas rusas, que aún no han facilitado datos sobre las víctimas de la invasión».
«Las operaciones -añadió Draghi- corren el riesgo de prolongarse
hasta la destrucción del sistema de defensa ucraniano. El gobierno ruso ha propuesto negociaciones directas con el gobierno ucraniano y ha confirmado que el objetivo es neutralizar y desmilitarizar Ucrania. Actualmente no hay una respuesta ucraniana».
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George is Digismak’s reported cum editor with 13 years of experience in Journalism