Madrid
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El comité español de la Cámara de Comercio Internacional (ICC, por su siglas en inglés) ha difundido este miércoles un comunicado en el que revela que el
modelo de contrato que utilizaron los empresarios Luis Medina y Alberto Luceño en su venta de material sanitario al Ayuntamiento de Madrid es falso: se trata de un documento apócrifo y obsoleto de cuya falsedad se viene alertando desde hace 15 años.
«Ese contrato se ha basado en un falso modelo atribuido a la Cámara de Comercio Internacional. Ese falso modelo, con inclusión no autorizada del antiguo logotipo de la Cámara de Comercio Internacional, es un texto que no se corresponde con ningún modelo de documento avalado por la ICC», dice la nota firmada por el secretario de la institución en España, Jordi Sellarés.
Se refiere al contrato suscrito por el supuesto proveedor malayo San Chin Choon, que sería consejero delegado de la empresa Leno, a quien se realizó la compra de mascarillas, guantes y test de diagnóstico por importe de 12 millones de euros con la
intermediación de Medina, que facilitó el contacto con el Ayuntamiento de Madrid; y Luceño, que llevó la negociación. Entre los dos se llevaron seis millones del contrato como comisión.
Según expone la ICC, no es sólo que el modelo soporte de ese contrato, que parece así estar amparado por la institución, sea falso, es que se trata además de una simulación ya obsoleta.
«La Cámara de Comercio Internacional (ICC), hace ya quince años, al detectar esa ola de ficticias atribuciones a su institución de ese falso modelo de contrato, al que se le daba el pomposo nombre de ‘Non circumvention non disclosure agreement’, con el acrónimo NCND, porque pretendía evitar el contacto directo de proveedor y comprador, sin remuneración del intermediario, ya realizó las alertas oportunas», explica la nota.
«No existe pauta internacional que cuantifique» las comisiones
En aquel momento, la ICC «se vio obligada a que su Comisión de Práctica Comercial Internacional -autora de sus reconocidos modelos de contrato de compraventa, de agencia, de distribución, etc.- elaborara un modelo de contrato de intermediación ocasional, mucho más simple, claro y lógico» que tiene un importe de 72 euros y se llama «Occasional Intermediary Contract Model», de acuerdo al comunicado adelantado por El Mundo.
Conforme detalle, en ese modelo, que es el «auténtico», no se incluye «ningún criterio sobre la cuantía de la comisión que corresponda al intermediario». De hecho, sostienen que «no existe ninguna pauta internacional que cuantifique ese importe», contra lo que afirmó
Luceño primero en la Fiscalía Anticorrupción y luego ante el juez Adolfo Carretero. Aseguró que se había guiado por las reglas de juego que marca la Cámara de Comercio de París, que forma parte del ICC.
«Este Comité Español de la Cámara de Comercio Internacional (ICC), ha reiterado a lo largo de los años, en cientos de mensajes de respuesta a usuarios tentados con comisiones importantes en operaciones sospechosas, usando el modelo apócrifo de contrato, que extremaran las precauciones con esa operación, que podría no existir, y que como mínimo, el contrato que le estaban ofreciendo no era auténtico», señala.
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George is Digismak’s reported cum editor with 13 years of experience in Journalism