Las consecuencias de los brotes de Covid en China: los mil funcionarios purgados en la gran lista negra de la pandemia

La estrategia de Covid Cero china desarrolla una gran presin sobre el control de los contagios, la falta de eficiacia se traduce en la prdida del puesto de trabajo

Seis meses despus de que estallara el primer brote de coronavirus en Wuhan, comenz a correr un informe de las agencias de Inteligencia de Estados Unidos sobre cmo los funcionarios de la ciudad del centro de China, por miedo a represalias, ocultaron informacin crucial de la propagacin del virus en sus inicios a sus superiores en Pekn.

Antes de que ese informe viera la luz, una investigacin del The New York Times desvel que desde que los mdicos de Wuhan comenzaran a tratar grupos de pacientes infectados por lo que era una misteriosa neumona en diciembre de 2019, los hospitales remitieron sus datos a las autoridades de salud locales. Sin embargo, por una aversin poltica a compartir malas noticias, esas autoridades ocultaron la informacin sobre los casos al sistema nacional de informacin, retrasando la respuesta de Pekn, que no cerr Wuhan hasta el 23 de enero de 2020.

“A las autoridades locales no les gustaba decir la verdad en ese momento”, reconoci el doctor Zhong Nanshan, jefe del equipo de la Comisin Nacional de Salud y rostro visible de la lucha de China contra el coronavirus.

Un mes despus del primer confinamiento de la pandemia, el presidente chino, Xi Jinping, orden una limpieza de altos cargos de Hubei, la provincia donde se encuentra Wuhan, por la gestin de la crisis. El primero en caer fue Jiang Chaoliang, secretario general del Partido Comunista Chino (PCCh) en la provincia. Despus fue cesado Ma Guoqiang, el secretario general del PCCh en Wuhan. La lista de purgados durante aquel febrero de 2020 la engordaron otros tres altos cargos de la Comisin de Sanidad de Hubei.

“Es la nica forma que hay para que todos los trabajadores que luchan contra el coronavirus entiendan que en China hay tolerancia cero con unos errores que cuestan vidas. Si fallan los responsables de vigilar que no se propaguen los contagios, tienen que ser castigados y que otras personas ms capaces ocupen sus puestos”, explicaba a este peridico un alto funcionario de la Comisin Nacional de Salud.

Han pasado dos aos desde el comienzo de la pandemia y China sigue luchando contra nuevos brotes, confinando ciudades, construyendo hospitales de campaa y testando a poblaciones enteras. Tambin contina la purga. Porque la presin de no poder controlar los contagios se sigue cobrando muchos puestos de trabajo. Segn reporta el diario chino Caixin, desde Pekn han despedido o castigado a ms de 1.000 funcionarios locales por fallos en sus respuestas de contencin.

El problema de la dura poltica exprimida por el Gobierno central es que muchos funcionarios de provincias han acabado teniendo ms miedo a perder sus empleos que al virus. Ah radica la base por la que en muchas ciudades se han adoptado medidas mucho ms extremas, llegando a cerrar urbes con millones de habitantes por un solo positivo, que las alentadas por el Ejecutivo de Xi Jinping.

China, que sigue sin renunciar a su estrategia de Covid cero, lleva mes y medio luchando contra su mayor brote desde los primeros das de la pandemia. El diario hongkons South China Morning Post cifra en al menos 74 los empleados pblicos que han acabado en la lista negra en marzo por los ltimos repuntes de casos.

Wang Hesheng, subdirector de la Comisin Nacional de Salud, culp el pasado viernes del aumento de contagios a la “actitud relajada” de algunos funcionarios. “Algunas autoridades locales piensan que micron solo causa sntomas leves y lo comparan con la gripe, y son perezosas. En todos los aspectos, no han hecho suficientes preparativos y han flexibilizado los requisitos sobre el control de la pandemia y la respuesta de emergencia”, dijo Wang.

En la provincia surea de Guangdong, fueron despedidos los subjefes de polica y el jefe de seguridad de Shenzhen y Dongguan, ambas ciudades confinadas a principios de marzo. En Futian, un distrito de Shenzhen, ocho funcionarios fueron cesados por “incumplimiento del deber en la lucha de la ciudad contra el virus”.

En Changchun, al norte de China, Gao Yutang, director de la comisin de salud, tambin fue despedido por, segn el aviso oficial, “no preparar, movilizar recursos ni supervisar suficientemente a las autoridades sanitarias de la ciudad para luchar contra el brote de micron“. En la ciudad Jilin, uno de los epicentros del ltimo brote, por la purga pasaron el alcalde y 12 funcionarios. Y en la provincia surea de Hunan, esta semana el castigo cay contra 19 mandos de distintos departamentos sanitarios porque, como argument la cadena estatal CCTV, ninguno de ellos “consolid enrgicamente las polticas de tolerancia cero contra la pandemia”.

Como ocurri en Wuhan cuando el Covid an no tena nombre, en China nadie quiere reportar malas noticias a Pekn. El presidente Xi Jinping pretende demostrar su determinacin responsabilizando a los funcionarios locales cada vez que el coronavirus se cuela por las puertas de sus provincias. No vaya a ser que la gente empiece a culpar al Gobierno.